La mujer y el dragón (parte 5)

El diablo se detiene delante de los verdaderos seguidores del Señor Jesús, con la finalidad de devorarlos. El apóstol Pedro vio eso, cuando dijo: «Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar» (1 Pedro 5:8).

Él quiere impedir a cualquier precio que aquellos que son miembros del cuerpo del Señor sean arrebatados y salvos. Nosotros somos miembros de Su cuerpo, carne de Su carne, hueso de Sus huesos. Por Cristo estar en nosotros, y nosotros en Él, en principio y por la fe, ya estamos arrebatados. De ahí la razón de por qué Pablo habla de un conocimiento que ya es realidad:

«… y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús» (Efesios 2:6).

Y ahora, se respeta la historia y el círculo del Plano de Salvación se fecha: actualmente la mujer Israel es la gran señal. Ella se encuentra con fuertes dolores de parto para la revelación del Reino de Dios en la tierra.

El odio de Satanás contra Israel aún no está dirigido en toda su plenitud, pues eso acontecerá sólo después del arrebatamiento de la Iglesia, cuando la mujer tuviera que huir hacia el desierto. Este odio total es contra la verdadera Iglesia del Señor Jesús, que está lista para encontrarse con el Señor en los aires.

De ahí la razón de por qué tanta persecución a la Iglesia Universal del Reino de Dios, tantas difamaciones y acusaciones sin sentido a sus líderes. Gran parte de la prensa, de las emisoras de radio y televisión son manipuladas por Satanás, a través de Babilonia.

Ellos intentan rotular la verdadera Iglesia Cristiana, usando el término «secta», no sólo intentando impedirla crecer, sino también preparando el camino junto a la opinión pública, para hacerla volverse contra la verdadera fe cristiana. Por eso mismo el apóstol Pablo advierte a los verdaderos seguidores del Señor Jesús:

«Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernantes de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes» (Efesios 6:12).

Continuará…

Si le interesa lea también: La mujer y el dragón (parte 4)

Libro: Estudio del Apocalipsis Vol 1
Autor: Obispo Edir Macedo

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