La vida de Víctor San Juan antes de llegar a la Iglesia Universal estaba llena de conflictos, no había manera de poder salir, tanto de los problemas financieros que lo atormentaban, como de lo atado que se encontraba al vicio del alcohol. Junto a su familia comenzaron a asistir a la Iglesia Universal, pero la tentación de continuar con una vida encaminada al fracaso lo hizo cambiar el rumbo en su camino a encontrase con Dios en Su sendero.
Víctor San Juan no solo tomó él la decisión, sino que además obligó a su familia a alejarse de la casa de Dios junto él.
Tras alejarse de la iglesia Víctor escalonó sus desgracias, volvió a entregarse a la bebida lo que le acarreó enfermedades y hasta terminó teniendo problemas con la ley, tal seguidilla de problemas en su vida lo dejaron consumido en la depresión.
Un día recibió una nueva invitación a participar en la Iglesia Universal y quedó intrigado al escuchar los testimonios de personas cuyas vidas habían cambiado gracias a la palabra de Dios por lo que puso también de su parte, y través de asumir un compromiso interior y exterior pudo, a través de la oración, recibir el Espíritu Santo y encontrar el sendero que le permitiría caminar junto a Dios hacia una vida fortificada.
Testimonio Víctor San Juan.
