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¿Cómo ha manejado su tiempo delante de Dios?

¿Cómo ha manejado su tiempo delante de Dios?

“La Palabra de Dios dice: Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”. Juan 14:6. La Palabra de Dios dice que el Señor Jesús es la verdad y la vida, esto es una revelación que nos muestra que cuando uno somete su vida al Señor Jesús, Él tiene para brindarnos lo mejor como hijos de Dios. Si un padre terrenal en la mayoría de las veces está dispuesto a dar lo mejor para sus hijos, cuanto más nuestro Padre Celestial.

“Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto. Juan. Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta.  Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?”.  Juan 14:7-9.

Dios menciona en Su Palabra ‘tiempo’, que es lo que se destacará principalmente de este versículo bíblico. El tiempo que Felipe se encontraba con el Señor Jesús era aproximadamente tres años y para el Señor Jesús era suficiente para que él lo conociera.

¿Hace cuánto tiempo que usted se encuentra en la presencia de Dios? Si usted tiene varios años en Su Presencia y sirviéndolo, y si su vida sigue de igual manera, se ha preguntado ¿por qué? Cada año inicia y termina con los mismos problemas ¿cuál es el motivo? Para lograr un cambio en el exterior es necesario que el cambio en primer lugar surja en el interior, se tiene que dejar de ser criatura de Dios para convertirse en hijo de Dios.

¿Cómo uno se convierte en un hijo de Dios? Se debe tomar una decisión que es dejar de vivir para uno mismo y comenzar a vivir de acuerdo a la orientación de Dios, no vivir más aferrado a los problemas que acontecen en el entorno, al contrario, comenzar a aferrarse a las Promesas de Dios y ponerse en la dependencia de Él. Por igual es importante la renuncia a los malos pensamientos, malos sentimientos, renunciar al propio querer y comenzar a alimentar todos los días la parte espiritual a través de oración, ayuno, lectura de la Palabra de Dios y vivir una vida por la fe.

La Palabra de Dios muestra en el libro de Hebreos que las promesas de Dios son superiores, Dios no quiere que como hijos de Él se viva en lo inferior, Él quiere lo mejor para Sus hijos. Dios quiere que vivamos una vida superior y no una vida inferior. Existen personas que por el tiempo que llevan en la presencia de Dios, deberían estar dando un testimonio de un hijo de Dios, pero eso han no ha sucedido. Y eso fue la indignación del Señor Jesús con Felipe, que después de 3 años Felipe aun no le conociera.

Para convertirse en un hijo de Dios, el sacrificio tiene que ser todo, esto es, no debe de haber renuncia solo material, sino también espiritual. Esto es, la vida entregada en el altar, entregada en su totalidad al Señor Jesús. Así como el Señor Jesús entregó la vida por nosotros para que tengamos vida eterna. Mientras vivamos en esta vida, se debe vivir una vida digna de hijos de Dios, una vida con paz, seguridad, alegría… Es así que cuando vengan los problemas que no se están exentos a ellos, se vencerán porque se vivirá con la seguridad y confianza en que somos hijos de Dios.

No deje pasar más el tiempo, el tiempo es ahora, no piense que su vida no cambia porque quienes están a su alrededor le causan problemas a usted. Enfóquese en usted, en nacer de nuevo, en que su ser sea transformado para convertirse en hijo de Dios y usted verá como todo es transformado en su vida.

Dios les bendiga.