Pero los que esperan en el SEÑOR renovarán sus fuerzas; levantarán las alas como águilas. Correrán y no se cansarán; caminarán y no se fatigarán. (Isaías 40:31).
Coloque en las manos de Dios su vida, futuro, confianza y esperanza, porque usted va a ver la transformación en su vida.