El árbol de la vida que se menciona en la Palabra, Dios puso en el huerto del Edén. Cuando Dios lo creó y lo puso en el Edén, dio el permiso de comer de todos los árboles que había en ese lugar, incluso del árbol de la vida que era el principal, pero hay un árbol que no se debería de comer y era el árbol del conocimiento del bien y del mal, el cual todo ser humano ha comido de él.
Cuando se tiene un encuentro con el Señor Jesús, se logra tener la vida que se ha determinado, dejando de vivir como el ser humano vive en el mundo que vive de esperanza, esperanzado a que tendrá una vida mejor cuando se case, cuando conquiste económicamente, cuando logré su sanidad, etc. Las personas viven de esa forma porque ellas aun no conocen las promesas que Dios tiene para darles que están en el árbol de la vida que es Su Palabra.
Cuando una persona no ha comido del árbol de la vida, la vida de ella está cimentada, se basa y se determina en relación a sus actitudes, selecciones y reacciones que están basadas en el conocimiento del bien y del mal. Cuando oriento a las personas, muchas de ellas vienen y me preguntan cuál es la razón, del porqué si ellas tratan o llevan una vida correcta, no hacen lo malo, pero aun así ellas sufren. La respuesta a esta pregunta es porque ellas no han comido del árbol de la vida que es la Palabra de Dios o después de comenzarse a alimentarse ya no lo hicieron o quieren seguir comiendo del árbol del conocimiento del bien y del mal, esto es, ellas saben lo que es el mal y el bien y siempre terminan haciendo el mal, porque no tienen fuerzas para vencerlo.
En la práctica significa lo siguiente, si se quiere vivir por la fe, se tiene que comer del árbol de la vida que es La Palabra de Dios, pero quienes viven en la duda y dependen de la aprobación de los demás es porque quieren seguir comiendo del árbol del conocimiento del bien y del mal.
La esperanza que se demora es tormento del corazón; Pero árbol de vida es el deseo cumplido. Proverbios 13:12. Todas las personas que viven de esperanza viven con el corazón enfermo. Quienes viven del árbol de la vida, no viven de esperanza. El Espíritu Santo enseña a través de la Palabra en el libro de Habacuc y en Hebreos, que el justo que come del árbol de la vida, vivirá por la fe. Quien es de Dios no vive por la esperanza, vive por la fe. Cuando la Palabra de Dios menciona que el árbol de la vida es el deseo cumplido, es el querer de Dios para uno. Así como era el deseo de Dios que Adán y Eva comieran del árbol de la vida, antes de comer del árbol del conocimiento del bien y del mal.
Cuando Adán y Eva fueron tentados, cayeron en tentación, fueron reprobados aun teniendo condiciones para vencer, pero ellos fueron los que tomaron la decisión de probar del árbol del conocimiento del bien y del mal. El querer de Dios era que ellos probarán del árbol de la vida. La razón del porque nosotros estamos aquí, es porque fue el Espíritu Santo quien nos trajo para que dejemos de comer del árbol del conocimiento del bien y del mal y comencemos a alimentarnos del árbol de la vida que es diariamente.
Cuando nos alimentamos del árbol de la vida, el deseo de Dios se cumple y este querer es que yo tenga una relación, una comunión de vida con Él, eso nos lleva a transmitir vida para los demás. Las personas con la que se convive reciben esta vida, porque el cristianismo es vida. Ser cristiano significa dar vida. No es vivir religiosamente, de preceptos y de reglas. Cuando nosotros comemos del árbol de la vida y seguimos alimentándonos, porque no es suficiente comer una sola vez, hay que comer día tras día, uno pasa a ver los deseos de Dios, cumpliéndose en su vida, los cuales son extraordinarios.
En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones. Apocalipsis 22:2. Así tiene que ser nuestra vida, nosotros cada mes tenemos que dar frutos, no solo resultados. Para producir frutos que es el amor, la paz, la alegría, la mansedumbre, el dominio propio, la fidelidad… Son estos frutos que tienen que mostrar mi vida, porque no es suficiente decir que estoy en la iglesia, que ayudo a la gente, si la base o el cimiento de lo que hago no tienen estos frutos que mencione anteriormente y si yo no estoy viviendo y siendo motivado por esos frutos, de esta manera, entonces no importarán los resultados, esto es, aquellas conquistas por la fe, como lo es la sanidad, las respuestas financieras, la vida sentimental y la familia delante de Dios no significan algo sino estamos alimentándonos del árbol de la vida y damos los debidos frutos.
Hay diferencia entre los resultados de la fe y los frutos de la fe. Cuando se está dando fruto, se es un cristiano que gana almas, da vida para los demás, para los que están a su alrededor, de tal manera que la gente que se le pasa vida, querrá servir también al Señor Jesús. Para pasar vida, hay que tener vida, de manera contraria solo se pasaran conocimientos del bien y del mal. Tener conocimiento no es suficiente, hay que tener vida, porque cuando uno tiene vida uno produce, mes tras mes.
Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán. Apocalipsis 22:3. En el madero de la cruz que antes era un árbol. El Señor Jesús al ser crucificado fue para que nosotros tuviéramos la oportunidad de la salvación, se convirtió en maldición, para que quienes se entreguen a Él y que han recibido la vida de Él no vivan más bajo maldición, sino bajo bendición.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, le daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios. Apocalipsis 2:7. Estos son los enemigos que el ser humano tiene: su propia carne, su voluntad propia, que es la vieja criatura, el mundo que le presenta tanto el conocimiento del bien y del mal, y el diablo. Pero el más fuerte de vencer de todos estos, es la naturaleza humana, pero si uno come del árbol de la vida uno tiene el poder de vencer. Analice esta pregunta y reflexione: ¿Cuántas veces se alimenta espiritualmente al día? Con oración, ayuno, lectura de la biblia y su servicio a Dios.
Si usted quiere que su vida de fruto, aliméntese del árbol de la vida que es la Palabra de Dios y los que están a su alrededor podrán ver que usted da vida y ellos querrán seguir su ejemplo.
Dios les bendiga.
