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Saliendo de la obscuridad

Saliendo de la obscuridad

Cuando el Señor Jesús se manifestó a este mundo, el Espíritu Santo a través de Su Palabra dice: “El pueblo asentado en tinieblas vio una gran luz y a los que vivían en región y sombra de muerte, una luz les resplandeció”. Mateo 4:16. Lo que refiera la Palabra de Dios es la condición espiritual de una persona que no ha tenido un encuentro con el Señor Jesús o que no ha tenido la experiencia del nuevo nacimiento, por lo tanto, no ha entrado en el reino de Dios.

Cuando no se ha tenido un nuevo nacimiento, la persona vive en la obscuridad, en una ceguera en su mente y eso hace que ella tome malas decisiones y vive equivocándose, no tiene control de sus emociones y eso la lleva a fracasar en la raíz de la vida. Al referirme a esta última parte me refiero a que la persona fracasa como padre, madre, esposo (a), hijo (a), en si fracasa como ser humano.

Dios en su Palabra deja inscrito cómo debemos proceder ante la vida, por ejemplo en proverbios 14:1 nos refiere que la mujer sabia, edifica su casa. Si el Espíritu Santo enseña que la mujer es quien edifica la casa, le hago la siguiente pregunta: ¿Dios está equivocado? Esto lo podemos comprobar, a causa de las circunstancias, las mujeres, tienen que trabajar para ayudar con los gastos, la economía de la casa… Creyendo que eso será suficiente, pero aun así el dinero no alcanza. La razón no es la falta de esfuerzo, sino que mientras no existe un nuevo nacimiento en la mujer no habrá sabiduría para saber cómo actuar y reaccionar ante las adversidades de la vida.

Domingo 8 de enero, 2023 703 Sur Broadway, Los Ángeles, CA.

Bíblicamente hablando el hombre representa la cabeza y la mujer representa el cuerpo. Quién mueve la cabeza, necesita el cuerpo, pero tampoco el cuerpo funciona sin la cabeza. El hombre que vive en la obscuridad vive en la ignorancia y él puede llegar a tratar a su pareja de manera violenta, con maltratos, no le cuida, no le brinda cariño y amor, etc.  El hombre que trata mal a su pareja, también se maltrata a si mismo. Pero, el hombre que ha salido de la obscuridad, Dios les da sabiduría para saber tratar a su esposa para mantener su matrimonio.

“Desde entonces Jesús comenzó a predicar: «Arrepiéntanse, porque el reino de los cielos se ha acercado”. Salmos 4:17. Dios está hablando a través de este versículo que existe la oportunidad de arrepentirse, de abandonar el pecado, de no mentir más, de renunciar a otras creencias que no provengan de la Palabra de Dios, porque sólo hay un Dios verdadero, Dios dio a su único hijo en sacrificio para que la humanidad tuviera la oportunidad de la salvación, por eso el Señor Jesús dio su vida en la cruz para que vivamos con la vida de Él en nuestra alma y así poder vivir en el reino de Dios. Lo que eso lleva a la persona a vivir una vida de paz y alegría que proviene de su interior no importando las circunstancias que ella/él esté viviendo.

Dios nos da la sabiduría, el conocimiento, las fuerzas para vivir y el poder para vencer en esta tierra. Cuando hay un verdadero arrepentimiento el siguiente paso es tomar la decisión del bautismo en las aguas, el bautisterio es la sepultura para todos aquellos que han decidido morir para este mundo, morir para su propia voluntad para comenzar a vivir en obediencia a la Palabra de Dios, para seguir y servir al Señor Jesús.

“Id, pues, y haced discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo”. Mateo 28:19. Dios nos ha elegido antes de la fundación del mundo, en el nombre de Su Hijo es porque Él dio la vida por la humanidad y el Espíritu Santo es quien nos convenció del pecado y quien abrió nuestra mente de la necesidad de la salvación. Nos mostró que nuestra alma estaba perdida y que teníamos que solucionar el mayor problema que la humanidad tiene que es el problema del alma y si no hay arrepentimiento no hay salvación.

Si usted al leer este mensaje ha decidido salir de la obscuridad que se encuentra, el primer paso es el arrepentimiento en lo posterior a bautizarse en las aguas, al tomar esta decisión usted está aceptando que su vida le pertenece al Señor Jesús y eso la llevará al paso más importante que es buscar y recibir el Espíritu Santo que le llevará a garantizar su conquista más grande que es su salvación.

Dios les bendiga.