Recientemente, los voluntarios del grupo de evangelización de Carolina del Norte viajaron a las ciudades de Asheville, Swannanoa y Black Mountain, que han sido severamente afectadas por el Huracán Helene. Este desastre ha provocado derrumbes, inundaciones y pérdidas significativas, dejando a muchas familias sin acceso a agua y electricidad en varios sectores. La situación sigue siendo crítica, y la comunidad está luchando para recuperarse de las devastadoras consecuencias del huracán.
En respuesta a esta emergencia, los voluntarios se unieron para brindar apoyo a los más necesitados. A través de su ayuda, cientos de familias recibieron alimentos, ropa, agua y pañales. Estas donaciones son vitales para ayudar a las personas a afrontar las dificultades cotidianas en medio de la crisis. La solidaridad y el apoyo tangible son fundamentales para aliviar el peso de aquellos que han perdido tanto.
Sin embargo, lo más importante de esta misión fue el mensaje espiritual que los voluntarios compartieron. Al llevar la Palabra de Dios, ofrecieron consuelo y esperanza a quienes enfrentan la adversidad. En momentos de desesperación, el apoyo emocional y espiritual puede ser tan crucial como la ayuda material, ya que brinda la paz que solo el Señor puede ofrecer. Estas acciones reflejan un verdadero espíritu de comunidad y compasión en tiempos difíciles.
La Iglesia Universal realiza labores sociales y evangelística todas las semanas. Si usted reside en Carolina del Norte acompáñenos en los servicios de fe en el 5000 N Tryon St Charlotte, NC 28213 o en la Iglesia Universal más cercana a usted.
Para más información sobre los eventos de la Iglesia y el trabajo evangelístico realizado por los integrantes del grupo EVG, visítenos en la página web universalchurchusa.org/es/
