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Hacer la voluntad de Dios para tener una vida próspera

Hacer la voluntad de Dios para tener una vida próspera

Para que las promesas de Dios se puedan cumplir en la vida de uno es necesario que se viva de acuerdo a Su Palabra. La Palabra de Dios nos refiere: “Pero quiso el Señor quebrantarle, sometiéndole a padecimiento. Cuando Él se entregue a sí mismo como ofrenda de expiación, verá a su descendencia, prolongará sus días, y la voluntad del Señor en su mano prosperará”. (Isaías 53:10).

 Analicemos por partes esta referencia bíblica:

“Pero quiso el Señor quebrantarle, sometiéndole a padecimiento…”. El Señor Jesús al dar la vida por la humanidad, todas las enfermedades, los dolores, en si todo el sufrimiento que existe en el mundo fue colocado sobre Él. El propio Padre puso sobre Él, para que llevará sobre si, nuestros pecados. La deuda que los seres humanos teníamos con Dios era impagable, pero se anuló en el momento que el Señor Jesús dio la vida por nosotros.

“Cuando Él se entregue a sí mismo como ofrenda de expiación…”.  El pecado nos aparta de Dios. A causa de eso, este tipo de ofrenda era presentada a través de un animal, que era una ofrenda de culpa, como paga de los pecados. El Señor Jesús fue nuestra ofrenda de expiación, que también significa purificación de los pecados.

“verá a su descendencia, prolongará sus días…”. La vida eterna no tiene fin y se obtiene cuando se tiene el Espíritu Santo, porque si Él está en nosotros eso significa que somos salvos. Y el Espíritu Santo a su vez nos da esa certeza de nuestra salvación, colocando paz y alegría no importando las situaciones, circunstancias o adversidades que se estén viviendo.

“…y la voluntad del Señor en su mano prosperará”. ¿Cómo creer que Dios está con uno, si no se tiene una vida próspera? La voluntad de Dios es que todo lo que llegue a nuestras manos prospere, pero para que esto suceda se tiene que actuar la fe de acuerdo a la voluntad de Dios y Su voluntad está en Su Palabra.

Domingo 19 de marzo, 2023

Lo natural para quienes viven por la fe, es vencer, tener testimonio, porque ella está viviendo de acuerdo a la voluntad de Dios. Y cuando se vive de acuerdo a la voluntad de Dios, la persona se somete en obediencia a Su Palabra. Por ejemplo, la persona sabe que la fornicación es algo que desagrada a Dios, ella lo abandona, porque eso hará que en su vida sentimental haya prosperidad, en relación a su familia, aunque ella no haya tenido un buen ejemplo en casa, sabe que, si educa a sus hijos de acuerdo con la Palabra de Dios, el propio Espíritu Santo le va a capacitar para enseñar a los hijos el camino de Dios. Eso provocará que tenga una familia unida y con armonía.

En relación a la vida financiera, si quiere avanzar económicamente, la Palabra de Dios orienta sobre el diezmo, ella comienza a obedecer y se convierte en diezmista, Dios la comienza a prosperar en su vida económica. Y así sucesivamente en cualquier área de su vida. Aún se esté haciendo la voluntad de Dios, para poder ver la prosperidad de Él, se pasarán por luchas, adversidades, situaciones críticas, etc. Pero, cada una de esas luchas se vencerán a través de la fe.

No hay oración que funcione si no hay obediencia. Si usted está haciendo algo y no está prosperando es porque lo que está haciendo no es de la voluntad de Dios. Si se quiere ver la mano de Dios en cada aspecto de la vida, se tendrá que actuar de acuerdo con Su Palabra, que es su voluntad. Hay personas que están haciendo la voluntad de Dios y todavía por lo que ellas están luchando no se ha cumplido, pero cuando se está viviendo de acuerdo con la voluntad de Dios, se tiene paz. Y si no se está viviendo de acuerdo con la voluntad de Dios, hay inquietud.

Cuando se vive bajo la voluntad de Dios, las cosas acontecen naturalmente y la vida no se queda estancada o trabada, los problemas que se enfrentan son con la seguridad plena de que serán vencidos. En la voluntad de Dios hay prosperidad, si usted coloca su vida en el centro de la voluntad de Él, su vida prosperará, no interesando las circunstancias o las adversidades que se encuentren pasando.

Dios les bendiga.