La Sociedad de Cardiología del Estado de Río de Janeiro (SOCERJ) comunicó que la enfermedad coronaria en la mujer es subestimada tanto por los familiares como por los médicos. Comúnmente se piensa que solo los hombres sufren infartos, porque la mayoría de las mujeres cuando tiene algún síntoma no dice nada y solo va a urgencias cuando ya es tarde, lo que aumenta la tasa de mortalidad.
las enfermedades del corazón matan a más mujeres a nivel mundial que el cáncer de mamá
Se cree que el cáncer de mama es la primera causa de muerte, pero según la Organización Mundial de la Salud (OMS) las enfermedades del mayor número de decesos.
ES IMPORTANTE QUE…
Detectemos si estamos teniendo los síntomas de un ataque cardiovascular, pues son señales de un posible ataque cardíaco, por eso, debemos reconocerlos de inmediato. Es increíble, pero hasta los médicos pueden atribuir los síntomas al nerviosismo, al stress o a una exageración de nuestra parte porque las señale son muy difusas.
Las señales que nos da el corazón son sutiles, difíciles de identificar y no siempre producen el característico dolor en el pecho. Puede manifestarse a través de náuseas, malestar general, sensación de ahogo o indigestión, fatiga y ansiedad extremas, dolor en el pecho, molestia en la parte superior del cuerpo, sudor frío, cambios en el ritmo cardíaco, mareos o aturdimiento.
¿Cómo sé que es una falsa alarma?
No estamos teniendo un infarto cuando:
– El dolor en el pecho es punzante, como un pinchazo pasajero.
– Si se aprieta en el punto que duele y aumenta el dolor, seguramente es un dolor torácico.
– Duele al toser o respira profundamente, podría ser debido a un problema respiratorio.
Lo mejor es prevenir, por eso, no debemos tener temor de consultar al médico ante la menor duda. Recuerda que hacernos un chequeo general por lo menos una vez al año es fundamental.
¡debemos cuidarnos!
Ante la presencia de uno o más síntomas, le aconsejamos que consulte a su médico de inmediato
LOS PROBLEMAS CARDÍACOS SE PUEDEN EVITAR CON ALGUNOS
CUIDADOS ESPECÍFICOS:
- Dejar de fumar.
- Comer sano y evitar los alimentos grasos, el exceso de sal y las carnes rojas.
- Controlar la presión arterial y los niveles de azúcar en sangre.
- Realizar ejercicio regularmente por lo menos 30 minutos al día. La caminata es una excelente actividad que puede adoptar.
- Mantener el peso ideal.
- Consultar al cardiólogo y realizarse los estudios periódicos que él le
- indique.
- Consumir alimentos ricos en antioxidantes.
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