Los brujos le prometieron un matrimonio ideal, pero todo no era más con un engaño.
Desde niña Luz Díaz habitaba en un mundo oscuro plagado por la brujería, su madre la había arrastrado a ser víctima de brujos quienes supuestamente le hablarían sobre su futuro. Pero en realidad su inocencia no le permitía ver que estas personas incluso la obligaban a hacer rituales en contra de su voluntad, todo porque según ellos de esta manera en su vida adulta obtendría un matrimonio ideal, pero todo no era mas con un engaño.
Luz Díaz arrastró ya de grande una serie de problemas debido a su estrecha relación con el oscuro mundo de la brujería. No solo perdió a su pareja y se acabó su matrimonio, sino que también perdió su negocio, su familia y amigos.
No tenía paz en su corazón, era una persona infeliz que deambulada los días con el constante deseo de quitarse la vida. Decidió volcar toda su frustración en el alcohol.
Una noche mientras se ahogaba en tragos y pensamientos negativos vio en la televisión una trasmisión de la Iglesia Universal e inmediatamente sintió la llegada de una nueva esperanza, sin pensarlo, Luz Díaz aceptó el reto de asistir a los sietes viernes, siete domingos donde pudo obtener un desenvolvimiento espiritual que cambió su vida.
Testimonio Luz Díaz.
