Vivir pensando solo en la construcción de su vida en este mundo y en sus proyectos personales es la receta para una vida infeliz y miserable, y para un alma frágil y débil.

Ganar el mundo entero y perder el alma (Parte 3)

Vivir pensando solo en la construcción de su vida en este mundo y en sus proyectos personales es la receta para una vida infeliz y miserable, y para un alma frágil y débil.

Por otro lado, una vida por la fe es una vida que está constantemente en el primer amor (que es Jesús). Su amor es puro, verdadero y no está apoyado en el sentimiento, sino en el sacrificio. Por eso, Él también exige sacrificio de nuestra parte.

… Si alguno quiere venir en pos de Mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día y sígame. Lucas 9:23

Negar su carne, sus deseos, sus concupiscencias y tomar su cruz, que es la muerte, el sacrificio. Y cuando se muere para este mundo, se vive en novedad de vida. Todo eso es alimentar nuestra alma, nuestro espíritu y nuestra fe; pero muchos se dejan llevar por sus voluntades y se relajan con los cuidados de su propia alma, y enseguida se enfrían en la fe y abandonan los valores espirituales.

Pero el que persevere hasta el fin, ese será salvo. Mateo 24:13

He perseverado a lo largo de estos últimos 58 años. Ya me tropecé y me caí muchas veces, pero me levanté y permanezco de pie porque prioricé el

recibimiento del Espíritu Santo. Él me guio cuando estuve postrado. Me mostró que era necesario que yo viviera esas experiencias para que aprendiera a no mirar atrás ni a los costados. En esos momentos vi la respuesta de Dios por medio de Su misericordia al levantarme y volverme a Él. No obstante, cuando la fe y el amor se enfrían, la persona no tiene ánimo para hablar con Dios ni para ser sincera y humilde para pedirle Su misericordia. Ya fue atrapada por el orgullo y poseída por ese espíritu de arrogancia, como Lucifer hizo en el Cielo y tuvo que salir de la presencia de Dios.

Sin embargo, Dios está con las manos extendidas hacia nosotros. Basta con que seamos humildes para recurrir a Él. ¿Qué tal hacerlo ahora?

Continuará…

Libro: Secretos y Misteriosos del Alma

Autor: Obispo Edir Macedo

Share This Post

More To Explore