«…Su Hijo fue arrebatado para Dios hasta Su trono. La mujer, sin embargo, huyó al desierto». Por un lado, hay aproximadamente dos mil años entre las dos frases, es decir: entre la ascensión del Señor Jesús y la fuga de Israel, que acontecerá después del arrebatamiento, es decir, durante la Gran Tribulación.
Esta visión apocalíptica de la mujer y el dragón, ya fue vista en las primeras páginas de la Biblia, cuando el diablo engañó a Eva, haciéndola desviarse de Dios.
Allí en el Jardín del Edén Satanás pareció vencer, sin embargo, aquí, en la revelación del final de los tiempos, su derrota es definitiva. A pesar de que el dragón tener siete cabezas, diez cifras y siete coronas, él no es el anticristo. El número diez indica la totalidad del dominio político mundial. El dragón es el anti-Dios-Padre, pues sobre él está escrito:
«Y fue expulsado el gran dragón, la antigua serpiente, que se llama diablo y Satanás» (Apocalipsis 13:4). La bestia es el anti-Dios-Hijo, y el falso profeta es el anti-Dios-Espíritu Santo. Siendo así, los tres forman la trinidad satánica.
El profeta Daniel describe a la bestia, asemejándola como el último imperio mundial: «Por tanto, el Señor dice así: No subsistirá, ni será» (Isaías 7:7).
Durante la Gran Tribulación el diablo va a intentar destruir a cualquier precio los recién nacidos de Israel, es decir, los ciento y cuarenta y cuatro mil que creerán en el Señor Jesús. Por eso mismo ellos son sellados en sus frentes, de parte de Dios. El diablo no va a poder tocarlos a causa de este sello.
Hoy, nosotros podemos sentir una pequeña muestra de lo que irá a acontecer en la Gran Tribulación, pues vivimos en una guerra constante contra las fuerzas del infierno. Y si no fuese el sello de Dios, la fuerza del Espíritu Santo en nosotros, no habría salvación. Por eso mismo, es de gran importancia que las personas recién nacidas en la fe cristiana, sean selladas con el Espíritu Santo. Porque solamente este sello puede darles resistencia contra cualquier investida del diablo.
Continuará…
Si le interesa lea también: La mujer y el dragón (parte 3)
Libro: Estudio del Apocalipsis Vol 1
Autor: Obispo Edir Macedo
