El Tercer Sello (Parte 2)

La balanza en la mano del caballero sobre el caballo negro apunta para el racionamiento de comida. Y nosotros tenemos una leve idea de lo que eso significa, pues, hay algunas décadas atrás, nosotros mismos participamos del racionamiento de carne, y en aquella altura, había filas kilométricas para comprar sólo un kilo de ese alimento.

Nosotros podemos acordarnos de muchas disputas y hasta agresiones corporales a causa de aquello. Imagine la escasez de todo y cualquier alimento. Una medida de trigo correspondía aproximadamente a 450 gramos y se juzgaba constituir el consumo diario de un hombre.

Por otro lado, un denario correspondía al salario de un día del trabajador. Entonces, si fuésemos a interpretar este versículo al pie de la letra, diríamos que un hombre tendrá que trabajar un día entero para poder comprar alimento sólo para sí mismo. Esto significa que su familia ciertamente pasará hambre. Ahí está la idea principal de ese tercer sello.

La cebada siempre fue considerada como alimento de pobres, pero en el cumplimiento de este sello, incluso siendo tres veces más barato de lo que el trigo, aun así, su valor está exorbitante, el que da para entender que, en aquellos días, el alimento más insignificante costará sólo tres veces menos que el más caro. En una familia no será capaz de sobrevivir en tales condiciones, lo que ciertamente hará generar condiciones sociales caóticas en todos los países del mundo. Esta idea principal de las tres medidas de cebada por un denario. La historia registra que cuando Jerusalén sufrió el cerco antes de su destrucción en el año 70 D.C., sus habitantes fueron llevados a la más cruel forma de des humanidad.

Se dice que los soldados romanos cuando entraban en la ciudad de Jerusalén, se encontraban cuerpos de niños aún no totalmente consumidos, sin embargo, guardados con ese propósito. en la verdad, la abertura de ese sello despertará en los hombres los peores aspectos de su carácter. La humanidad verá su propio martirio por la falta de Dios.

«…y no damnificados el aceite y el vino». Hay dos principales interpretaciones a este respecto: La primera dice que, incluso en medio de tanta hambre esparcida por toda la tierra, aun así, habrá una minoría que continuará gozando de abundancia y viviendo en la opulencia, es decir, los ricos continuarán viviendo bien, debido a sus riquezas acumuladas. En una segunda interpretación, se considera que la Biblia, el aceite es el símbolo es el símbolo del Espíritu Santo, y el vino de la sangre redentora del Señor Jesús, significando entonces que esos elementos son, en la verdad, una simbología de los cristianos verdaderos, aquellos que viven sus vidas basadas en las pautas de la Palabra de Dios, entonces el aceite y el vino no siendo damnificados, puede significar que la Iglesia del Señor Jesús no sufrirá daño. ¿Pero cómo puede la Iglesia no sufrir los daños del hambre generalizada? La única respuesta para eso es que ella entonces no participará de la Grande Tribulación.

Continuará…

Si le interesa lea también: El Tercer Sello (Parte 1)

Libro: Estudio del Apocalipsis Vol 1
Autor: Obispo Edir Macedo

Share This Post

More To Explore